Cuestión de suerte

Cuando quemaba mis últimos cartuchos como portero de fútbol, me topé con un entrenador excelente. Nuestro equipo siempre perdía puntos en el descuento de los partidos, e incluso se iba de vacío a casa tras haber ido por delante durante buena parte del encuentro. Un equipo con plantilla suficiente para objetivos más ambiciosos se veía reducida a pelear por el descenso por no saber cerrar los encuentros. El míster siempre nos decía en el entrenamiento posterior al partido que "la suerte hay que buscarla". Esta frase fue la primera que se me pasa por la cabeza cuando veo jugar al Paderborn.

Dos míseros puntos en cuatro jornadas le convierten en un firma candidato al descenso, para el que no siga al equipo de forma habitual. Sin embargo, los pupilos de André Breitenreiter merecieron mucho más la semana pasada ante un Colonia muy espeso. Saglik las falló de todos los colores con el 1-0 en el marcador, lo que me lleva a otra frase clásica de otro entrenador mío: "el que perdona, la paga". Y vaya si la pagó el SCP. Przbylko puso las tablas en el descuento para el equipo de Peter Stöger, al que anularon injustamente un tanto en la jugada posterior por una falta inexistente sobre el guardameta local. Lo que hace el oficio en esto del fútbol.

Pese a ir ganando 0-2, el Paderborn volvió a dejarse remontar | Foto: Picture Aliance

Cuando parecía que el equipo del Benteler Arena estaban curados de espanto, con 0-2 pasados los primeros 50' de juego, el equipo se volvió a dejar empatar en poco menos de media hora. El penalti cometido sobre Elías Cachunga -impresionante jugador- permitió a los visitantes volver a tomar ventaja sobre un Arminia Bielefeld que empataría con una nueva carambola, como no, en el descuento. Dos puntos más que se le escapan a un Paderborn que anda ávido de triunfos.

Una suerte que si parece acompañar a los tréboles -curiosamente-. El implacable líder de la 2.Bundesliga, el Greuter Fürth, ganó en una nueva plaza difícil como es el Wildparkstadion de Karlsruhe pese a ir perdiendo gran parte del encuentro gracias a un zapatazo de Vitzthum. Los hombres de Frank Kramer remontaron un partido en el que nunca fueron superiores gracias a los tantos de Kraus y Drexler, ante los constantes fallos de la delantera local y se consolida en la cabeza de la clasificación con un 12/12.

Verhoek marcó los dos tantos para el St. Pauli | Foto: Picture Aliance

La ambición que tuvieron los líderes les diferencia del Bochum, gran equipo pero carente de personalidad y constancia. Verhoek dio la vuelta al tanto de Butshcer, con la ayuda inestimable de un gran Rzatkowski. Con su equipo por debajo, Peter Neururer decidió retirar a Yusuke Tasaka, el jugador más creativo de la escuadra, a la hora de partido. Aún así, los locales igualaron el encuentro a 20 minutos del final y, cuando mejor posicionados estaban para llevarse el encuentro, decidieron conformarse con el empate. Como decía aquel entrenador mío, "la suerte hay que buscarla".